Para abordar los desafíos interrelacionados que enfrentan los productores de cacao, se necesita una combinación de medidas políticas, incluida la creación de acuerdos de asociación a largo plazo entre los gobiernos de los países productores de cacao y los de los principales países consumidores de chocolate.
Esto dice una nueva declaración y un documento de posición compartido por la organización de defensa del cacao, VOICE Network. Fairtrade International se unió a VOICE junto con un grupo de empresas y organizaciones de chocolate para instar a la Comisión Europea a buscar un acuerdo bilateral con los países productores de cacao que dé prioridad a las cadenas de suministro sostenibles para las personas y el planeta.
Los desafíos críticos actuales, como ganarse la vida, el abuso de los derechos humanos y la degradación ambiental son frecuentes en el sector del cacao. Para abordarlos, se necesita una combinación de medidas políticas a nivel de la UE y del país proveedor. Deben asegurarse de que las empresas tomen medidas, pero también deben ayudar a abordar las causas fundamentales de problemas complejos como el trabajo infantil.
Vale la pena resaltar que para llegar a soluciones realistas e impactantes, estos acuerdos de asociación a largo plazo deben involucrar a todas las partes interesadas relevantes, incluidos los representantes de la comunidad local, los productores, la industria y la sociedad civil.
Según nuestro documento de posición conjunto, los objetivos de estos acuerdos de asociación deberían ser:
1. Aclarar qué se necesita para establecer un sector de cacao sostenible dentro del país productor socio y qué deben hacer los diferentes actores de la cadena de suministro para lograrlo.
2. Establecer los cambios en la gobernanza, incluida la transparencia y la política, y/o una mejor aplicación de las políticas existentes, que serían necesarias para producir cacao de manera sostenible.
3. Poner en marcha mecanismos de apoyo e incentivos, incluida la financiación, para garantizar que se apliquen los cambios y las medidas de política necesarios.
4. Establecer sistemas de seguimiento para evaluar los impactos de los cambios y medidas de política y garantizar que se eviten las consecuencias negativas no deseadas para las personas o el medioambiente.